La clarividencia se menciona en textos antiguos y se cree que los humanos han sido capaces de «ver» cosas desde el principio de los tiempos. Hay muchas referencias e historias relacionadas con el fenómeno de la clarividencia, pero la mayoría son ficticias. Es a partir de la Edad Media cuando se empieza a mencionar la práctica de «curar con la ayuda de la clarividencia». Durante esta época, la gente empezó a asociar la «clarividencia» con la «curación» porque había mucha gente enferma que buscaba remedios, y por eso la asociaban con «poderes curativos». No es hasta el siglo XVII cuando se empieza a investigar seriamente el fenómeno de la clarividencia. En aquella época, el método científico no estaba bien desarrollado y no había laboratorios que pudieran poner a prueba las afirmaciones de las personas que decían tener «poderes curativos» especiales. La mayoría de las personas que hablaban de «clarividencia» durante este periodo eran fraudes que intentaban robar dinero. La primera investigación real sobre el tema de la clarividencia la llevó a cabo el filósofo y científico francés René Descartes. Descartes intentaba demostrar que no había comunicación entre el cerebro y el cuerpo, por lo que realizó muchos experimentos para ver si una persona podía «ver» algo que no estaba presente. Su método consistía en poner a una persona en una habitación con dos puertas cerradas, una de las cuales da a una pared que no existe en esa habitación. A continuación, se debía pedir a la persona que «viera» la pared. Con este método, Descartes pudo demostrar que la clarividencia no existe.

Métodos utilizados para la clarividencia

Hay muchas formas en las que se dice que se adquieren las habilidades paranormales. En el primer caso, una persona utiliza el «órgano del curandero». Este órgano se encuentra en el cuello y se supone que está conectado a una zona muy sensible del cerebro que permite a las personas «ver» cosas. Mucha gente cree que este órgano se activa con el sonido de las notas de un piano. Pero esto no es cierto: aunque algunas personas dicen que pueden sentir ciertos tonos en el teclado, se trata de un mito creado por estafadores que quieren utilizar esta idea para engañar a la gente haciéndoles creer que pueden «ver» cosas con sus manos si tocan ciertas notas. De hecho, no existe ninguna prueba científica que demuestre que tocar un determinado tono active el «órgano» o que pueda hacer que alguien vea cosas. La segunda forma en que alguien puede adquirir clarividencia es a través de «poderes psíquicos»; la persona cree tener poderes sobrenaturales y los utiliza para «ver» cosas, tal y como el tarot Alicia Collado. El problema con este tipo de «habilidades» es que son extremadamente difíciles de controlar y pueden utilizarse fácilmente para engañar a la gente.

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